Patricia Bullrich lanzó duras críticas hacia la vicepresidenta Victoria Villarruel, calificando de "mala leche y fuera de lugar" sus comentarios sobre la actuación del gobierno en el caso del gendarme secuestrado en Venezuela. La ministra de Seguridad sostuvo en una entrevista que tales declaraciones no solo son infundadas, sino que también generan un clima innecesario de confrontación dentro de la administración.